Ruta de la fauna de Senet

La ruta de la fauna que os proponemos se inicia en Senet y asciende rápidamente por la vertiente de la montaña, siguiendo el camino antiguo del puerto de Gelada. Transcurre por un paisaje donde la huella humana es muy evidente, con un mosaico de antiguos cultivo y prados de siega, separados por márgenes y muros de piedra seca. Es un ambiente muy rico en fauna, donde es fácil descubrir el rastro de la raposa o del jabalí.

En lo alto de la cuesta se alcanzan los extensos prados subalpinos, donde pace el ganado durante los meses estivales. Si caminamos atentos, podremos observar los grupos de rebecos pastando en las partes más altas, o sorprender a algún corzo en los límites de los prados y el bosque. Desde aquí arriba se puede contemplar el colosal alud de derrubios del barranco de la Esbornada, que es uno de los grandes protagonistas geológicos del valle de Barravés. Finalmente, entre pinares de pino silvestre, la ruta se acerca hasta el mirador de Estarredono, desde donde podréis disfrutar de una privilegiada panorámica del valle y los contrafuertes del macizo de la Maladeta.

Espacio de interés natural de Gelada

Este espacio se extiende por la sierra que separa los valles de Boí y Barravés, entre Senet y Barruera. Ocupa una extensión de 2285 ha y está centrado por el gran puerto de Gelada, que le da nombre. Una de las razones principales que ha motivado la protección de este territorio es la presencia de viejos pinares subalpinos de pino negro, que acogen una fauna de alta montaña muy representativa.

El itinerario recorre el límite inferior del EIN Gelada y ofrece buenas perspectivas, desde los miradores de Artigalonga y de Estarredono.